¡Hola, hola!
¿Cómo están?
A raíz de la pandemia surgieron muchos cambios dentro del hogar: desde la necesidad de cumplir con los diversos deberes (trabajo, escuela, salud) hasta la propia convivencia familiar. Estos eventos tocaron una fibra sensible que, día a día, muchos dejamos pasar; sin embargo, fue un punto de inflexión que toco sondear con inteligencia desde la perspectiva de jefes de hogar.
Es un tema complejo y delicado que se evita con más frecuencia de lo que se cree, pero que ha mejorado o empeorado las relaciones entre los familiares. Entre tanto, se le dio más énfasis al concepto de madre presente y al equilibrio laboral para ir aportando más valor al núcleo familiar.
En vista de estos sucesos, hemos querido compartir con ustedes varios tips listos para poner en práctica que nos ayudarán a mejorar la relación entre padres e hijos, sin afectar tu rendimiento como emprendedora o limitar tu productividad profesional.
¿Listas?
La importancia del equilibrio para mejorar la relación entre padres e hijos
El equilibrio es un elemento fundamental en estos días y no solo para niveles personales, sino para nuestras relaciones, bien sea con padres, hijos, hermanos o con nuestra pareja. Ser equilibradas con las responsabilidades y el tiempo nos dará la oportunidad de darle la importancia y el valor a las personas que nos rodean diariamente.
Al ser madres, es importante lograrlo, ya que solemos ser el puente entre las responsabilidades, los quehaceres, los regaños y los consuelos de la familia; pues, no siempre nos toca atender solo a los pequeños de la casa. Seguramente el ambiente familiar deseado no incluye peleas, disturbios y, mucho menos, reacciones violentas ante la vida o situaciones complicadas.
De hecho, sobre los hombros maternos suelen recaer las cargas más pesadas, incluso las más cuesta arriba, pero las suficientes para continuar edificando un futuro propio junto a la familia con nuestros valores inmersos.
3 hábitos que ayudan a mejorar la relación entre padres e hijos
Jugar como un equipo ganador junto a tu pareja es una de las ventajas cuando tiene hijos; sin embargo, al estar sola también puedes practicar cada uno de estos hábitos para que crees, fomentes o mejores la relación que ya tienes con ellos.
Escúchalos en sus momentos difíciles
Un gran hábito es escuchar. Muchas veces los padres estamos tan enfocados en producir para lograr estabilidad y cubrir todas las necesidades de los pequeños que se nos olvida escucharlos en sus momentos difíciles. Ideal sería crear sesiones o citas flash con tus hijos haciendo actividades diversas como caminar, tomar té o ir por un helado.
De hecho, es muy común ver que sus problemas no son tan relevantes o pueden resolverse con cierta facilidad, pero olvidamos que necesitan una guía para salir de ellos. Y esa guía somos los padres.
Compartan sus gustos y disfruten juntos
Aunque no lo crean, a veces compartimos más cosas en común con nuestros hijos que con otras personas o familiares incluso. Desde gustos por un tipo de comida en específico, géneros de películas o series, hobbies y actividades deportivas. Así que, en vez de esperar un compañero perfecto, anótate con tu hijo o hija en sus tiempos libres.
Ver una película, evaluar el catálogo de Netflix, practicar un nuevo deporte juntos, ir a comer sus platos favoritos en un restaurante especial o invéntate una novedad en casa. ¡Saca partido de sus gustos y diviértanse!
Apóyense en los días grises y festejen las buenas nuevas
Con el tiempo verás que tus hijos se convertirán en tus mejores amigos o tu compañía favorita para charlas extensas, noches especiales o para consejos. El vínculo que han logrado es único, especial y excepcional que solo logra una madre con su retoño, así que no lo dejes perder.
Por eso, brinda una mano amiga y siempre comunica tu apoyo incondicional hacia ellos. Hazles entender que estarás ahí en cualquier momento, sea bueno o malo, incluso si te enojas por sus acciones. No hay nada mejor que el apoyo inteligente e incondicional.
Asimismo, festejen juntos sus logros. Una nota excelente en una materia complicada o tu ascenso en el trabajo. Tal vez su graduación o el logro de nuevos clientes.
Por último, recuerda algo importante:
A veces, tú tendrás que dar el primer paso para crear la relación perfecta con tus hijos.
Y tú, ¿qué hábitos has implementado para mejorar tu relación con tu hijo o fortalecer vínculos con tu hija? ¡Déjanoslo saber en los comentarios!
¡Nos vemos la siguiente semana!